Luego del cuarto intermedio, a las 16:30 aproximadamente, se reinstaló la audiencia de medidas cautelares en contra de los dos hijos y esposa del excomandante de la Policía Boliviana Oscar Nina.
Varios recursos de incidentes presentados por la defensa de los acusados por los supuestos delitos legitimación de ganancias e enriquecimiento ilícito, además de presuntos nexos con el narcotráfico, retrasaron la audiencia cautelar que se realiza en el Juzgado Quinto Cautelar de Santa Cruz.
La jueza Ximena Flores, recibió una ampliación de la imputación formal presentada por el equipo de fiscales de la Unidad Anticorrupción liderada por Ana Heredia, y dispuso un cuarto intermedio hasta las 15:30 de este miércoles.
Los imputados son: el general Oscar Nina, su esposa Nancy Morales Mendieta, sus hijos Nayma Lorena Nina y Oscar Hugo Nina, además de un mayor de policía de apellido Millares.
En horas de la mañana, el ministro de Gobierno, Hugo Moldiz dijo que existen "serias sospechas" de que la familia de Nina, esté vinculada a delitos de narcotráfico. "Por eso el Ministerio de Gobierno también está metido en esto y creemos que se ha dado un buen primer paso y le corresponde hoy a la justicia acelerar la resolución de este caso para sentar un precedente", declaró citado por la agencia ABI.
Se refirió también a la detención de en las últimas horas de los familiares del excomandante. "Creemos que es una señal clarísima de que no habrá complicidad de ninguna naturaleza, y la Policía está obligada a actuar en consecuencia", añadió.
El general Óscar Nina fue posesionado como comandante de la Policía Boliviana el 24 de enero de 2010, pero el 11 de marzo de 2011 fue destituido sorpresivamente del cargo por el presidente Evo Morales, quien puso a Ciro Farfán en su reemplazo.
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